Parte de mi compromiso

Fotografía de Compromiso es la manera en que yo he bautizado lo que hago, originalmente motivado por la fotografía de conservación de naturaleza y luego orientado además a otros aspectos sociales y antropológicos. Pero mi amor por la naturaleza es algo de lo que no puedo despegarme ni con fuego. Hoy revisando mi banco de imágenes me encontré con unas fotos que le hice a una Lechuza Cara Ceniza (Tyto glaucops) en Villa Mella, junto a mi amigo-hermano Fausto Fontana. De vez en cuando me pongo a repasar las razones por las que hice tal o cual foto, por qué elegí ese composición, y por qué usé un setting específico. Me gustaron muchas fotos de ese día, y esta en particular me pareció muy interesante por la línea diagonal de la rama, la textura de las plumas del ave y la de la rama, que me parece es de un árbol de aguacate. Con el fondo negro dramático que de inmediato refiere la hora del día en que andan activas estas aves, se resaltan además sutiles verdes, naranjas de hojas secas suspendidas entre las telarañas y la hermosura de esta ave endémica con su plumaje de infinitos marrones, un corazón color ladrillo en el disco facial, líneas negras dejadas caer magistralmente para dibujar mágicos contrastes que sugieren pictografías indígenas y esa cara color grafito de lápiz de estudiante enamorado que deja una cardio-ceniza declaración de amor en la parte de atrás de su mascota de química.

Si usted ve la foto y solo aprecia "una lechuza en un palo", probablemente pensará que estoy algo loco o que soy un poeta pariguayo...en cualquier caso, GRACIAS, me parece que ha dado en el clavo! Y es que a mí la naturaleza me sublimiza, las bellezas de la creación me tocan el corazón desde los azules iridiscentes de un insecto, hasta las curvas de cello de una hermosa mujer; desde el beso de ducha del rocío hasta el abrazo agradecido de un niño perdido depositado en los brazos de sus padres. La belleza está en todas partes, expuesta a nuestros ojos pero es nuestra apreciación la que está escondida tras un velo de prejuicios o ignorancias, y las lechuzas no escapan a esto. Asociadas durante siglos con brujas y fantasmas que flotan silenciosamente en la noche, han sido vilipendiadas inmisericordemente hasta la llegada de una generación de medios de comunicación que nos muestran la verdad de su vida en interesantes documentales...y de conservacionistas con compromiso que usan sus imágenes, su facilidad de comunicación, y su carisma incluso para hacer llegar el mensaje de Conservación. Así de chiquitos como somos en esta isla comparona, no tenemos un paisaje como el de las Rocallosas, ni las Cataratas del Niágara, ni una Gran Muralla...pero tenemos una infinidad de cosas que nos hacen únicos y que muchos de nosotros no conocemos, como esta lechuza que no solo es endémica de la Hispaniola sino que además es la única endémica de las Américas que corresponden al género Tyto..."Gran cosa, Chicho", pensarán algunos...aaah, pero otros países siendo mucho mayores que nosotros no la tienen. Bueno, por lo pronto, considerense tocados hoy por mi compromiso, y si al menos uno se identifica con esto y lo asume como suyo, me consideraré satisfecho.