El Guardia
Llevo años retratando galleros como parte de un proyecto sobre identidad. Cada uno de ellos tiene algo singular, e irónicamente en el caso del Guardia, no pareciera tener nada que lo asocie a un pasado en el ejército, salvo su porte de general retirado. Su quepis ha sido sustituído por una gorra de los Bombarderos del Bronx, su cara afeitada ha dado paso a los bigotes bien cuidados y acabados de remojar en un vaso de leche. Sus lentes de McArthur que esconden cualquier expresión de los ojos, completan el look de Groucho o Cálico Electrónico. La mano delante como arma de reglamento, y su gallo indio, infinitamente hermoso, parece sostenido por Paris Hilton, con pantalones y camisa a juego.
P.D. Dedicado a mi Némesis y Blogger Extraordinaire Darío Martínez Batlle en su Cumpleaños.
Comentarios