Lepidópteros
Este Orden es uno de los más grandes de la Clase de los Insectos y está compuesto por Mariposas y Polillas. Su nombre nos indica la principal característica de este grupo y deriva de las palabras griegas lepis, que significa "escamas" y pteron que significa "ala". Si bien la gente percibe más fácil las escamas en las alas la verdad es que todo su cuerpo está cubierto de escamas e incluso lo que a veces vemos como pelillos son en realidad escamas modificadas.
Los miembros de este orden no pican ni muerden y muchas de ellas son maravillosamente hermosas. A través del tiempo han aguijoneado la creatividad de varios artistas y pensadores. Chopin le dedica una pieza preciosa, y este hermoso proverbio chino "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo", es la base del conocido efecto mariposa: La idea es que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema natural, la más mínima variación en ellas puede provocar que el sistema evolucione en formas totalmente diferentes. Sucediendo así que, una pequeña perturbación inicial, mediante un proceso de amplificación, podrá generar un efecto considerablemente grande.
Pablo Neruda escribió este hermoso poema llamado Mariposa de Otoño:
La mariposa volotea
y arde —con el sol— a veces.
Mancha volante y llamarada,
ahora se queda parada
sobre una hoja que la mece.
Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.
Yo tampoco decía nada.
Y pasó el tiempo de las mieses.
Hoy una mano de congoja
llena de otoño el horizonte.
Y hasta de mi alma caen hojas.
Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.
Era la hora de las espigas.
El sol, ahora,
convalece.
Todo se va en la vida, amigos.
Se va o perece.
Se va la mano que te induce.
Se va o perece.
Se va la rosa que desates.
También la boca que te bese.
El agua, la sombra y el vaso.
Se va o perece.
Pasó la hora de las espigas.
El sol, ahora, convalece.
Su lengua tibia me rodea.
También me dice: —Te parece.
La mariposa volotea,
revolotea,
y desaparece.
Entre los artistas contemporáneos se han inspirado en ellas mencionandolas en sus canciones como las mariposas de sangre marrón y las que cazan los niños con grano de Sabina, las mariposas blancas en la nieve de Serrat o las Mariposas de la noche de Perales y otros que le han dedicado expresamente sus canciones como como La Oreja de Van Gogh, Maná, Danny Daniel, Fito Páez y mis preferidos en canciones con este tema: Presuntos Implicados. Oír a Sole cantando y vale decir que jazzeando "Mil Mariposas" es un regalo para el alma. Para mí es además una de las canciones más sensuales que he escuchado. Alguien tiene mariposas para compartir?
La especie de la Foto es una Mariposa Cola de Espada (Hypanartia paullus), que habita solo en las Antillas Mayores, en los bordes del Bosque Húmedo y en lugares abiertos. Se encuentra desde áreas bajas hasta los 1000 metros de altura. Este especimen en particular lo conseguí en la carretera que lleva desde San José de Ocoa hasta Valle Nuevo, en la orilla del camino.
Los miembros de este orden no pican ni muerden y muchas de ellas son maravillosamente hermosas. A través del tiempo han aguijoneado la creatividad de varios artistas y pensadores. Chopin le dedica una pieza preciosa, y este hermoso proverbio chino "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo", es la base del conocido efecto mariposa: La idea es que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema natural, la más mínima variación en ellas puede provocar que el sistema evolucione en formas totalmente diferentes. Sucediendo así que, una pequeña perturbación inicial, mediante un proceso de amplificación, podrá generar un efecto considerablemente grande.
Pablo Neruda escribió este hermoso poema llamado Mariposa de Otoño:
La mariposa volotea
y arde —con el sol— a veces.
Mancha volante y llamarada,
ahora se queda parada
sobre una hoja que la mece.
Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.
Yo tampoco decía nada.
Y pasó el tiempo de las mieses.
Hoy una mano de congoja
llena de otoño el horizonte.
Y hasta de mi alma caen hojas.
Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.
Era la hora de las espigas.
El sol, ahora,
convalece.
Todo se va en la vida, amigos.
Se va o perece.
Se va la mano que te induce.
Se va o perece.
Se va la rosa que desates.
También la boca que te bese.
El agua, la sombra y el vaso.
Se va o perece.
Pasó la hora de las espigas.
El sol, ahora, convalece.
Su lengua tibia me rodea.
También me dice: —Te parece.
La mariposa volotea,
revolotea,
y desaparece.
Entre los artistas contemporáneos se han inspirado en ellas mencionandolas en sus canciones como las mariposas de sangre marrón y las que cazan los niños con grano de Sabina, las mariposas blancas en la nieve de Serrat o las Mariposas de la noche de Perales y otros que le han dedicado expresamente sus canciones como como La Oreja de Van Gogh, Maná, Danny Daniel, Fito Páez y mis preferidos en canciones con este tema: Presuntos Implicados. Oír a Sole cantando y vale decir que jazzeando "Mil Mariposas" es un regalo para el alma. Para mí es además una de las canciones más sensuales que he escuchado. Alguien tiene mariposas para compartir?
La especie de la Foto es una Mariposa Cola de Espada (Hypanartia paullus), que habita solo en las Antillas Mayores, en los bordes del Bosque Húmedo y en lugares abiertos. Se encuentra desde áreas bajas hasta los 1000 metros de altura. Este especimen en particular lo conseguí en la carretera que lleva desde San José de Ocoa hasta Valle Nuevo, en la orilla del camino.
Comentarios
Anonimo.
Bonita silueta, no?
En el aire estaba
impreciso, tenue, el poema.
Imprecisa también
llegó la mariposa nocturna,
ni hermosa ni agorera,
a perderse entre biombos de papeles.
La deshilada, débil cinta de palabras
se disipó con ella.
¿Volverán ambas?
Quizás, en un momento de la noche,
cuando ya no quiera escribir
algo más agorero acaso
que esa escondida mariposa
que evita la luz,
como las Dichas.
Ida Vitale.
Ese maravilloso poema de Neruda nos permite recordar lo volátil del tiempo y las pequeñas cosas que de vez en cuando dejamos pasar.
Como cosa mía le dejo otro de los poemas en honor a la mariposa, escrito por Federico García Lorca:
Mariposa
Mariposa del aire,
qué hermosa eres,
mariposa del aire
dorada y verde,
¡Quédate ahí, ahí, ahí!...
No te quieres parar,
pararte no quieres.
Mariposa del aire
dorada y verde.
Luz del candil,
mariposa del aire
¡Quédate ahí, ahí, ahí!...
¡Quédate ahí!
Mariposa, ¿estás ahí?
Le pedimos -o le rogamos- que nos haga llegar material sobre la situación en la Sierra de Bahoruco para contribuir en la medida de lo posible a despertar conciencias para hacer crítica ácida y responsable del crímen verde.
Cuando el capuyo..piensa en la magia del color, su esfuerzo vuela antes q la Mariposa..
Borges y Jazz, suena infinito..
Exitos,
Oh Asere PG!!..
Exitos,
su tríptico de pétalos se posa,
con la fijeza de una mariposa
que congelara en flor su desenfreno.
Tiene en su cáliz de candor un pleno
aire más fino que nevada rosa,
y del perfume, doncellez premiosa,
la suave gala de blancor sereno.
Vuelta de niebla y música su vida
es retazo de luna: ahí fundida
vobró la noche en su primer rocío.
Así quedó la mariposa en vuelo
sobre la media página del cielo,
¡clavada al aire en alfiler de frío!
Lilian Serpas
(Nació en San Salvador en 1905. Hija del distinguido pensador Carlos Serpas. Vivió muchos años en Estados Unidos y en México. Es la primera mujer que cultiva una poesía de clara intención conceptual, dentro de los límites formales del post-modernismo. Extraordinaria cultura del soneto).
Vinistes a mi pecho a posar,
Juguetona y libre como el mar.
Acariciando mi corazón
Con tus bellas alas de amor.
Como una dulce mariposa
Tu boca su néctar me dio.
Deliciosa miel que mi espíritu bebió.
Revoloteastes entre mis sentidos,
Entregándome los suspiros de tu alma.
Como una apasionada mariposa
Mezclastes tus sueños con los míos.
Concediéndome tus preciosos momentos.
Momentos mágicos de tu esencia de mujer.
Te amo mi bendita y silvestre mariposa.
Miguel Ángel Muñoz
(Cuernavaca, Morelos, 1972), poeta, historiador y crítico de arte, es autor de los libros de ensayo Yunque de sueños. Doce artista contemporáneos (1999), Ricardo Martínez: una poética de la figura (2001), La imaginación del instante: signos de José Luis Cuevas (2001) y Materia y pintura: aproximaciones a la obra de Albert Ràfols-Casamada (2002). Además, es autor de los libros de poesía Origen de la niebla (1998), Gravitaciones (1999), Ritual de signos (2000) y Convergencia, con serigrafías de José Luis Cuevas (2003). Sus textos periodísticos aparecen en múltiples publicaciones nacionales. Es director de la revista literaria Tinta Seca).
Como siempre digo, cultura con sabrosura en este blog.
Saludos cordiales :P
Otra cosa que @#$%! lo de Al Gore, a parte de que hay que ser rico para escucharlo en persona, también tiene acciones en minería, que coj@#$%^!!!!
Saludos desde el Mediterráneo.
Abrazos.
Abrazos.
Besos.