Querebebés en cortejo
Antes de que caiga la noche, el Querebebé (Chordeiles gundlachi) sale de su letargo diurno y de su críptico disfraz para patrullar los cielos y capturar insectos o como en esta ocasión, para crear un gran alboroto y con su vuelo rápido y errático llamar la atención de su amada, solo que esta vez realiza increíbles clavados, vuelos en picada que complementa con exhibiciones de la cola en forma de abanico y de las manchas blancas alares. Sus hábitos alimenticios son esencialmente crepusculares, forrajeando insectos voladores. Esta imagen que hice el sábado cerca de Bahía de Las Calderas, no muy lejos de Salinas de Puerto Hermoso, es difícil de lograr, por lo que me da mucha satisfacción haberla conseguido.Para ver una foto de un Querebebé anidando en el suelo, favor de ver esta otra entrada.
Comentarios
Saludos!
Saul y yo estuvimos al amanecer en Calderas ese sabado y pudimos verlos cazando y en pleno cortejo. Pudimos ver porque le llaman Night Hawk, es maravilloso verlo.
Inclusive vimos como los petigres atacan a estas aves que los superan en tamaño.
Su grito es penetrante e intimidante.
Raro que no nos toparamos, hubiera sido un gran placer contemplarlos contigo.
Un abrazo
Pedro ya que vas mucho a Calderas, Bani. Te acuerdas de “La Caldera del Diablo”, ¡que miedo en blanco y negro! Ja,ja…
Felicidades por la toma…
:)
Abrazos Cimarronicos